Estoy encantada de estar aquí tecleando, después de tanto tiempo, una vez más, para compartir con todos vosotros esta elegante pizza y para desear unas Felices Fiestas.
Pizza llamada blanca porque no se elabora con tomate. Es otra de esas recetas facilitada por mi amiga Elodie, la compartió conmigo hace ya algún tiempo y me sorprendió gratamente. Se ha convertido en una de las favoritas de la familia y es ideal para estas reuniones familiares o con amigos en estas fechas porque al llevar productos ibéricos pasa de ser una vulgar pizza a una apta para estas celebraciones navideñas.
Ingredientes
Masa de pizza.
Una mozzarella fresca de bufala.
Un puñado de rúcula
100 gr del mejor jamón o paleta ibérica.
Un chorro de buen aceite de oliva virgen extra.
Un golpe pimienta del himalaya.
Orégano.
Elaboración
Elaboramos la masa de pizza o bien si no tenemos tiempo podemos adquirir una de compra que resultan muy buenas y prácticas.
Precalentamos el horno a 200º por arriba y por abajo, colocamos en la masa de la pizza la mozzarela de búfala fresca cortada en rodajas, rociamos con un chorro de aceite de oliva virgen extra de calidad, lo podéis adquirir como yo hago últimamente por mi falta de tiempo online, en alguna tienda gourmet que suministre estos fantásticos productos, y a continuación incorporáis el orégano y la pimienta recién molida. LLevamos al horno durante unos 10 min. a fuego fuerte sobre rejilla, no bandeja y bajo de altura para que la masa quede crujiente.
Por último retiramos del horno e inmediatamente añadimos la rúcula y el jamón ibérico en tiras y cortado lo más fino posible. Es un bocado espectacular y diferente que sorprenderá a cualquiera de vuestros invitados en estas fiestas.